Dos bienes se consideran complementarios si la subida del precio de uno de ellos provoca una reducción de la demanda del otro. Por ejemplo, la gasolina y los automóviles son bienes complementarios.
Ver también bien sustitutivo.
Dos bienes se consideran complementarios si la subida del precio de uno de ellos provoca una reducción de la demanda del otro. Por ejemplo, la gasolina y los automóviles son bienes complementarios.
Ver también bien sustitutivo.